Deportemanía

Desde el principio de los tiempos el ser humano ha tenido que ejercitarse físicamente para poder cazar o para poder migrar de una cueva a otra. Siempre ha tenido que estar en constante movimiento y de hay que hoy en día siga manteniéndose esa costumbre, pero de forma muy diferente. A esa otra forma la llamamos deporte, ese ejercicio físico que parece que se ha vuelto indispensable en nuestras vidas. ¿Pero es en realidad el deporte algo tan importante en nuestra sociedad? Yo creo que no, por lo menos no tanto como para invertir tanto tiempo y tanto esfuerzo en él.



1) Para empezar no tiene ningún sentido que la prensa mas leída en nuestro país sea la deportiva, siendo el periódico más vendido de España el Marca .Solo con ver la importancia que se le da al deporte, por encima de temas de economía o cultura, comprobamos el absurdo de nuestra sociedad.

2) Además, cada vez podemos encontrar más material deportivo, mas tiendas de deporte, mas eventos deportivos,etc. Pero lo más sorprendentes son éstos últimos. Me refiero a las diferentes maratones y recorridos que se organizan por todo el mundo. Una de las más famosas es la de New York, a la que acuden miles y miles de personas procedentes de multitud de países, solamente para recorrer más de cuarenta kilómetros en el menor tiempo posible. Son esfuerzos excesivos que castigan a nuestro cuerpo, y es que si a muchos les preocupa la obesidad, también les debería preocupar que la gente haga este tipo de esfuerzos, muchas veces inhumanos.

3) Por último, me gustaría hablar de la exagerada cantidad de dinero que se invierte en ciertos deportes como el fútbol, el baloncesto o la fórmula1. Hace poco pudimos comprobar como el presidente del Real Madrid se gastó más de 200 millones de euros en fichajes para su club. Pero tampoco se quedan atrás los 100 millones de euros anuales que se gastan los equipos de formula1.

C) En conclusión, podría decir que el deporte es algo que cada vez tiene mas practicantes y seguidores, pero deberíamos aprender a controlar nuestras emociones y dedicarle más tiempo a lo que verdaderamente importa.