¿ Existe la perfección?

Muchísima gente se esfuerza en alcanzar la perfección, no solo física sino también económica, teniendo un sueldo que le ayude a salir adelante y permitirse algunos caprichos, tener un buen hogar, buena salud, viajar, etc. En cuanto al físico, mucha gente alardea de perfección porque se acerca a los cánones que debe cumplir una persona para ser perfecta, como por ejemplo la característica de 90-60-90 considerada como medida ejemplar para una mujer. ¿Pero acaso existe la perfección o solo es un conjunto de características marcadas por la sociedad en la que vivimos?

Los cánones de belleza se han ido transformando a lo largo de la historia. Empezando por la percepción de la belleza que tenían en la prehistoria y en la edad de piedra, que podemos apreciar mediante ciertas muestras escultóricas, como la Venus o diosa de la fertilidad o la Venus de Willendorf, de las cuales podemos deducir que el modelo de belleza femenina eran mujeres con los órganos reproductores muy marcados (pechos, vientre, caderas anchas…). Algunos escultores griegos como Policleto basaron la belleza masculina en las matemáticas afirmando que el atractivo del ser humano consistía en medir 7 veces la altura de la cabeza. Para Leonardo Da Vinci, en cambio, el hombre era el modelo del universo y lo más importante era vincular lo que descubría en el interior del cuerpo humano con lo que observaba en la naturaleza. En Japón, por ejemplo, la blancura de la piel es sinónimo de belleza aunque verdaderamente, los cuerpos bronceados por el sol sean los más favorecidos.

Hoy en día hemos llegado a tal punto de obsesión por el modelo de delgadez, que un médico australiano ha afirmado que Santa Claus (o en nuestro caso, Olentzero) promueve una mala vida debido a su obesidad, es decir, que es un gordo borracho que promueve un estilo de vida poco saludable. ¿A este paso, hasta donde llegaremos? Al fin y al cabo, nadie es perfecto.

Con esto afirmamos que el canon de belleza no es universal, ya que depende de factores externos. Entonces no existe la perfección física porque cada uno la valora de diferentes maneras o simplemente porque no existe. En mi opinión la perfección es la naturalidad de uno mismo y de las cosas que nos rodean y no un conjunto de factores marcados por nosotros mismos. Eso no quiere decir que ciertas personas que han sido simbolos de belleza según estos canones no sean bellas. Por ejemplo, pocas personas dirían que Marilyn Monroe no es bella.