dia 22 de diciembre: dia nacional de la salud.

Ya han pasado ocho días desde que la felicidad y la ilusión llegaron a las casas de algunos afortunados, ganadores de la lotería nacional de navidad.

Es increíble ver la repercusión de estos decimos, las personas se dejan una media de 70€ (y los hay que mucho más) con intención de ganar El Gordo, y poder pasar una feliz navidad rodeados de su familia. La lotería moderna nació en Cádiz sobre 1811 para aportar fondos a la Hacienda Pública que se quedó resentida por la Guerra de la Independencia. Además, durante la Guerra Civil, fue un modo de crear esperanza ante las personas.

Como todos los años, llega el esperado día, día cercano a la nochebuena y, después de que los niños del colegio San Ildefonso de Madrid, canten los números premiados, los no tan afortunados se consuelan con el tópico de: “por lo menos tenemos salud”.

Parece ser que la salud juega un papel minoritario ante el gran poder del dinero, y que el dinero es sinónimo de felicidad y amor. Increíble, la idea tan materialista y falsa que nos ha enseñado la sociedad, fruto del gran sistema económico del que vivimos. En realidad, la sociedad solo alimenta la avaricia de las personas. Es la propia persona la que siempre quiere más de lo que tiene, en vez de conformarse con lo que es.

Ganaría mucho más si no se gastara todo ese dinero en el sorteo. Es cierto, que si no juegas, no ganas, pero en realidad ¿Qué es lo que ganas? Falsedad. La idea de una falsa vida, en la que solo importan cosas irrelevantes que solo sirven para el propio bienestar, en vez de la familia, el amor, la amistad, e incluso la salud.