¿ME HAN SUSPENDIDO O HE SUSPENDIDO?

¿Cuántas veces habremos escuchado la frase "me han suspendido" o "me han puesto esta nota"? En el ámbito de la ensñanza han cambiado muchas cosas desde la época de Franco o antes. Antes el respeto al profesor, sobre todo el respeto interior o más bien el miedo que tu sentías hacia él no te dejaba ni murmurar este tipo de frases. Hoy en día estos hábitos, llevados muy al extremo, han dado la vuelta y ahora los profesores son los que sufren y los que cargan con la culpa de todo, aunque haya varias extepciones. Ya que los derechos de los estudiantes son nulos y muchos son los profesores que o bien abusan de la autoridad que conyeva su cargo ante los alumnos o que no lleva la matería al día, es decir, que le da igual su trabajo y no se merece tener el privilegio de ser un profesor.
Volviendo al tema de antes, cuando un alumno dice que le han suspendido, dicho alumno esta acusando al profesor de que el haya suspendido o le está echando la culpa de haber suspendido, lo que conyeva que le acusa de ser un mal profesor o un profesor injusto. Aun así no estoy totalmente en contra de esta expresión, ya que hay profesores que son suficientemente arbitrarios, mediante otras palabras, te tiene la suficiente manía para hacer que la nota de tus exámenes bajen considerablemente. El profesor desde el primer momento que te conoce ya te pone una etiqueta y aunque no hayas hecho nada esa etiqueta puede ser de lo más negativa, o bien por la ropa que llevas o bien por muchas otras razones. Cada vez puedo apreciar más está injusticia, pero lo peor de todo es lo impotente que me puedo sentir al no poder hacer nada. No hay ni una solución o arreglo si intentas quitar la etiqueta que te han puesto, ya que el profesor va a seguir pensando lo mismo de tí. Aunque solo sea un instinto, que el profesor al leer tu nombre en el examen siempre va a tender a bajarte considerablemente la nota, en cambio, al alumno adorable que siempre saca nueves y dieces, siempre tiende a subirle la nota, por muy mal que haya hecho el examen.
En conclusión, siempre tenemos que estar seguros a la hora de juzgar a un profesor, por muy abituales que sean esos dichos, porque le estamos acusando de ejercer mal su profesión.