La selectividad del año pasado y de los anteriores no constaba con las dos preguntas de literatura, lo que supone mas tiempo y esfuerzo. Pero no, no nos lo dan. El cambio del modelo de examen ha sido por querer crear una prueba de acceso a la Universidad más transigente y tolerante para que nos abra más puertas a la hora de elegir una carrera. Por supuesto, lengua no es la única asignatura que mantendrá cambios. Filosofía, Historia y algunas otras también, sólo que éstas se realizaran en un tiempo proporcional a la materia que entra. A pesar de eso, esta nueva selectividad también tendrá ventajas. Cada alumno podrá elegir tres asignaturas de modalidad que valgan más y podrá conseguir una nota más alta que en los exámenes de otros años, con el fin de poder tener más oportunidades para conseguir la nota que necesita para hacer su carrera.
Con este nuevo planteamiento que ha anunciado el Ministerio Escolar de Educación y Ciencia los más perjudicados somos los alumnos. Esto no hace más que meternos presión y miedo. Miedo a fallar, y no hay peor cosa que eso. Seguramente a más de uno el temor a fallar le ha impedido (o le impedirá) jugar. La cosa es que con los nervios que llevamos de casa, el ver que no da tiempo a terminar el examen como dios manda le hace a uno agachar la cabeza. Por lo tanto, hay que agarrar al toro por los cuernos y hacer lo máximo posible para obtener una calificación considerable, por mucho esfuerzo que requiera.

0 comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.