Calentamiento global. ¿Podemos quedarnos con los brazos cruzados?

Todo el mundo sabe que, poco a poco, nuestro planeta se va calentando como consecuencia del aumento del CO2 en la atmósfera, así como de otros gases efecto invernadero...

La mayoría de las actividades humanas generan dióxido de carbono, claro que en algunas poblaciones se genera más que en otras. Por ejemplo, África y América, comparándola con América se podría decir que África apenas contamina.

Pero en general, los 6,7 mil millones de habitantes de la tierra, la hemos ido contaminando, tanto por la actividad industrial, como por la privada. Aunque es importante mencionar que genera más la actividad industrial, y por tanto, tiene más responsabilidad.

¿Cómo se genera ese dichoso CO2? Como antes he mencionado, la mayoría de nuestras actividades lo genera; desde los transportes, hasta la producción de la electricidad que utilizamos en el hogar.

Hay que tener en cuenta que los coches son algo que los utilizamos a diario, tanto en viajes cortos, para ir a trabajar; como en viajes largos, de vacaciones... Muchos ecologistas han intentado convencernos de que reduzcamos el uso de este transporte, aconsejándonos que caminemos en los trayectos cortos, o a usemos la bicicleta; dejando así a un lado las motos o los coches.

Pero a pesar de que lo intenten, es muy difícil convencer a la gente, ya que en esta sociedad los coches son algo que están muy integrados y es muy difícil dejarlos de lado, puesto que nos facilitan la vida bastante.

Por eso han inventado unos coches que, según dicen, no generan tanto carbono dióxido como un coche corriente, son los coches eléctricos.

Para los problemas del consumo energético, además de su reducción, una buena solución serian las energías renovables. La energía eólica, que utiliza el viento para generarla; la energía solar, térmica o fotoeléctrica, que utilizan la radiación solar; la energía hidráulica, aquella que utiliza los saltos de agua; maremotriz, que genera energía gracias a la marea.

Pero mientras tanto, todos podemos colaborar reduciendo el consumo energético con pequeñas medidas en casa: apagar las luces cuando no sean necesarias, bajando la temperatura de la calefacción,etc.