LA TEMPESTAD

No es fácil comenzar la lectura de una novela si aquel que debe leerla no es aficionado a ella. Sin embargo, el titulo atractivo y sugerente de acción puede hacer cambiar de opinión a más de uno. Ese ha sido mi caso. No me arrepiento en absoluto de haber leído tal novela, es entretenida y he aprendido mucho a cerca de Venecia. Cierto es que esta novela es de intriga y que el argumento de la obra es inventado, pero la idea que desprende la novela sobre la ciudad, es tan real que parece que te traslada de nuevo al siglo XX en Venecia.

La novela, alterna por un lado pasajes con mucha acción, en los que sucede un asesinato, justo el primer día que Alejandro Ballesteros, el protagonista de la obra, llega a Venecia. La intriga de saber quien él es el culpable y porque, hará que ya desde el principio el libro nos atrape. Por otro lado, las descripciones minuciosas, que en ocasiones resultan obscenas, narran cada detalle de los ambientes de la novela: las calles, sombrías y oscuras, los canales, silenciosos y amenazantes, y las personas, que en el caso de la mujeres, son demasiado detallistas y se alternan con pensamientos del propio protagonista. Este último rasgo del libro ha sido lo que más me ha impactado, porque no se limita solamente a describir muy a fondo a las mujeres que conoce en la novela, sino que además, cuenta sus sentimientos sobre ellas, o sus deseos y aspiraciones. Quizás, este rasgo también está influenciado por su anterior novela “coños” la cual es ya muy sugerente por su titulo.

La novela, cuenta la trama de un joven profesor de arte, que viaja a Venecia a completar su estudio de la obra de Giorgione, La tempestad, la cual da titulo a la novela. Ballesteros, llega en pleno invierno, cuando Venecia se encuentra inundada por las abundantes crecidas de la laguna, por eso las descripciones sobre Venecia resultan ser muy tenebrosas.

Nada más llegar a Venecia y tras acomodarse en su habitación presencia la muerte de un hombre muy conocido en Venecia, un falsificador de arte, y le acusan a Ballesteros de su muerte. A falta de pruebas, el jefe de policía le deja libre. Poco a poco, Ballesteros comienza a integrarse en la vida de la ciudad, y comienza a conocer a gente que se dedica al arte, bien a la colección o bien a la falsificación. Según va avanzando el argumento de la novela, la acción de la obra se intensifica por las investigaciones de Ballesteros que se inmiscuyen en problemas enraizados en Venecia, en los que él no tiene nada que ver. Finalmente, Alejandro se ve envuelto en una historia que no debería ser la suya y acaba generando pasajes con mucha acción e incertidumbre que se verás resueltos al término del libro.