¿Progreso=ROBOTS=Paro global?

Cada día la robótica avanza, es una ciencia que está despegando y que cada vez va más rápido. Los expertos lo llaman la tercera revolución industrial. Empezó con los ordenadores y gracias a ellos se ha ido desarrollado a una velocidad milagrosa. Además, su éxito es tan grande que hoy en día se encuentra en cualquier lugar. Sin embargo, ¿sabemos de lo que estamos hablando?

Un robot es una máquina, que mediante un programa, introducido por su creador, hace diferentes tipos de trabajos. Estos, pueden ser activados por agentes externos al robot, por lo que éste tiene que tener sensores para notarlos. Hoy en día es tal su eficacia que lo más seguro es que todo el mundo haya visto uno: Una muñeca de juguete, las alarmas de casa, una puerta que se abre cuando nos acercamos. Además tiene múltiples aplicaciones como cuidar una casa mediante las alarmas, abrir una puerta, mediante puertas automáticas, o activar el abs. de un coche mediante sensores en la rueda. Por lo tanto, podemos decir que a simple vista son solo ventajas las que nos proporciona este tipo de artilugios.

Además, se han hecho grandes avances en seguridad y medicina, gracias a la robótica y por ello vivimos mejor. Hoy en día, prácticamente, cualquier medio de transporte moderno lleva un ordenador a bordo. Este sistema en los automóviles ha reducido muchos accidentes, porque te anuncia si llevas una rueda pinchada, o también te indica cuántos kilómetros de combustible te quedan. También hay robots que desactivan bombas, reduciendo las posibles bajas humanas. Otro gran avance es la nanorrobótica, una rama de la nanotecnología, que promete beneficios de todo tipo, desde nuevas aplicaciones en medicina, a soluciones de problemas ambientales y muchos otros.

Teniendo en cuenta las ventajas que tiene la robótica no es lógico que haya gente que esté en contra de ella, sin embargo, la hay, pero ¿porque?
Ante las aparentes ventajas de estos instrumentos, se esconden máquinas tan perfectas que pueden sustituir el trabajo humano, incluso mejorarlo con creces.
En la sociedad en la que vivimos, toda persona tiene el derecho de trabajar para conseguir un sueldo. Sin embargo, este derecho se ve privado en multitud de ocasiones por unos robots que sustituyen el trabajo de muchas personas, haciéndolo más rentable. Este es un miedo que poco a poco va cogiendo más y más fuerza, sobre todo en los trabajos más simples. Ahora, las maquinas están en todo tipo de fabricas, cualquier mecanismo más o menos monótono que antes era resuelto por una o varias personas, ahora lo desarrolla una única máquina, con mucha mayor productividad y menor coste. Esto perjudica gravemente a los trabajadores que cada vez más, son expulsados de sus trabajos.

Esto plantea un serio problema que tiene diferentes puntos de vista:
Por una parte el empresario tiene derecho a aumentar su potencial haciendo inversiones en robots y sustituyendo a sus trabajadores por aquellos. Por otra parte, el trabajador exige su derecho, de poder trabajar. Son dos ideas muy justas, las dos, pero la robótica se desarrolla cada vez más y su progreso es tal, que pronto, cualquier actividad humana podría ser sustituida por algún robot. Muestra de ello son un par de inventos desarrollados el año pasado: En el primero, una empresa japonesa fabricó un robot capaz de impartir una clase y de responder a las respuestas de los alumnos. El segundo, es un mayordomo construido por una empresa de los emiratos árabes. Si esto se puede diseñar, ¿qué no? ¿todo tipo de trabajo va a ser sustituido por robots?

Yo creo que eso no es algo que debería pasar, y pienso que debería haber un equilibrio entre los robots y las personas. Finalmente han sido inventados para servirnos, no para sustituirnos y eso es lo que se debería hacer con ellos. Además gracias a la robótica, hemos conseguido llegar hasta donde nunca antes se había conseguido: llegar a profundidades inmensas en el mar, seguir la migración de aves, aterrizar en Marte… por eso en vez de limitar su uso deberíamos compenetrarnos más, hacer un equipo, para conseguir llegar más lejos. Al fin y al cabo ¡quien sabe! a lo mejor cualquiera podría acabar el día de mañana sustituido por un robot.